El Romanticismo fue un movimiento cultural que acompañó a los procesos revolucionarios burgueses desde finales del siglo XVIII y hasta mediados del siglo XIX. Fue un movimiento revolucionario por su oposición a la sociedad del Antiguo Régimen y su defensa de la libertad personal y nacional. Ser romántico era ser una persona disconforme con la sociedad, inclasificable y totalmente original, un buscador de la libertad siempre insatisfecho, lo que hacía que muchas veces los románticos acabaran suicidándose, lo que era considerado como el acto romántico supremo, especialmente si se hacía en la juventud.
Como fenómeno cultural, lo podéis encontrar en música en autores como Beethoven, Schumann, Chopin, Schubert, Verdi o Wagner. En literatura nos os podéis perder a Lord Byron, Goethe, Victor Hugo o, en España, Gustavo Adolfo Bécquer. En pintura destacaron Friedrich, Géricault i Eugène Delacroix.
Para hacerse una idea, como práctica, aunque fuera un ratito, no estaría mal, por ejemplo, que escucharais la Quinta sinfonía de Beethoven si os sentís con energía, una pieza de Chopin si estáis románticos o algún fragmento de Verdi si queréis espectáculo, que leyerais algún fragmento de Los sufrimientos del joven Werther, y que dedicarais cinco minutos de vuestra vida al cuadro El caminante sobre el mar de nubes, de Friedrich. Probadlo y entederéis qué es ser un romántico.
De todas formas, no os perdáis esta explicación de Ramón Gener para acabar de entender qué es el Romanticismo. Si os habéis sentido bien, aquí tenéis toda su intervención. Vale la pena.
De todas formas, no os perdáis esta explicación de Ramón Gener para acabar de entender qué es el Romanticismo. Si os habéis sentido bien, aquí tenéis toda su intervención. Vale la pena.
El autor que nos ocupa es el pintor Eugène Delacroix. Os dejo recursos para que lo conozcáis mejor, al igual que sus obras más significativas:
Autorretrato con chaleco verde, 1837
La matanza de Quíos, 1824
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